David Beckham lo juega. Cristiano Ronaldo también lo juega. A Lionel Messi le encanta. Neymar tiene canchas instaladas en su casa. Kaká lo juega. De hecho, sería difícil encontrar un futbolista en 2024 que no sea un fanático de esta moda del híbrido del tenis y el squash. El mundo entero lo está jugando. Bueno, el mundo entero excepto los estadounidenses que están obsesionados con un tipo diferente de tenis llamado Pickleball. Pero mientras el Pickleball apasiona a los americanos, hay un juego diferente que se ha apoderado del resto del mundo y de sus futbolistas: el pádel.
¿Qué es el pádel?
Se cree que el deporte se originó en Acapulco, México, alrededor de 1969, y se le atribuye a Enrique Corcuera. Se dice que Corcuera no tenía suficiente espacio para construir una cancha de tenis, por lo que construyó una cancha con muros alrededor. Originalmente, el área de juego tenía paredes y superficies de concreto, sin posibilidad de espectadores. Con el paso del tiempo, estos fueron sustituidos por paredes de vidrio y césped artificial.
Jugado en parejas, el juego es similar al tenis y también al squash. En pocas palabras, tiene las paredes del squash y las reglas del tenis, con un par de complejidades adicionales. Se pueden utilizar las paredes de vidrio para realizar tiros, los saques se realizan bajo el brazo y la raqueta utilizada es más pequeña y pesada que una raqueta de tenis típica.
En tiempos de COVID-19, se consideraba que el deporte era “sin contacto” en canchas al aire libre y la popularidad del deporte creció exponencialmente. Las canchas de tenis infrautilizadas y los campos de fútbol pequeños se convirtieron rápidamente en canchas de pádel cuando los inversores se aprovecharon del revuelo y se dieron cuenta de que casi tres canchas de pádel podían caber en el espacio de una cancha de tenis tradicional.
Nasser Al-Khelaifi, presidente del PSG y presidente de Qatar Sports Investment (QSI), vio el potencial y compró los derechos para gestionar el circuito profesional de Padel, calificando la decisión como “histórica”.
Me encontré con John Terry compitiendo en un torneo de pádel en Portugal en 2017, pero la leyenda retirada del Chelsea estaba un poco por delante de la curva. El pádel siempre ha sido popular entre los jugadores españoles, argentinos y portugueses, pero sólo en los últimos años se ha expandido por todo el mundo. Generalmente se considera un deporte de bajo impacto en comparación con el fútbol, lo que puede ser beneficioso para los futbolistas que buscan reducir el riesgo de lesiones o buscan formas alternativas de ejercicio durante los períodos de recuperación. Lamentablemente para los jugadores del Barcelona, tuvieron que retirar temporalmente sus raquetas ya que el club les prohibió a las estrellas practicar cualquier actividad deportiva fuera de su Ciutat Esportiva.
También es un juego social y competitivo, y no sorprende que la cantidad de canchas en el Reino Unido se haya duplicado desde 2022. Parte del motivo de la expansión de las canchas de pádel en todo el mundo es que los futbolistas están utilizando su afición para realizar inversiones comerciales. Diogo Dalot, lateral derecho del Manchester United, inauguró el Padel Athletic Club (PAC), un nuevo club para aficionados al pádel en su ciudad natal, Oporto. En colaboración con Paquito Navarro, campeón de pádel, el centro cuenta con 14 canchas cubiertas de alta calidad, incluidas dos canchas premium con características similares a las utilizadas en competiciones profesionales.
Dalot no es el único. Virgil van Dijk ha invertido en Game4Padel, una empresa con sede en el Reino Unido que financia, diseña, construye y promueve el deporte en todo el país. Dominic Calvert-Lewin y Jamie Vardy hicieron lo mismo. Los propietarios del condado de Notts, Alexander y Christoffer Reedtz, también son fanáticos del pádel y, aprovechando la oportunidad, utilizaron el terreno libre junto al estadio Meadow Lane, anteriormente desocupado, para construir cuatro canchas de pádel para todo tipo de clima. Robert Lewandowski ha invertido en un torneo llamado Copa Hexagon. Incluso Cristiano Ronaldo se ha sumado a esta tendencia y se ha asociado con la Federación Portuguesa de Pádel, que ha anunciado que la “Cidade do Padel” (Ciudad del Pádel) se construirá en Lisboa en una colaboración conjunta entre CR7 y una firma inversora portuguesa.
This is why Cristiano Ronaldo is the greatest padel tennis player of all time. 😍pic.twitter.com/7bJBEfOcg8
— The CR7 Timeline. (@TimelineCR7) June 3, 2023
Otros jugadores y clubes han invertido en canchas para su uso personal. Neymar instaló una cancha en su casa de Brasil. Jurgen Klopp hizo instalar una cancha en el campo de entrenamiento del Liverpool. En la base de entrenamiento de la Selección Española se habilitaron varias canchas. Se dice que Messi se enamoró del deporte mientras estaba en Barcelona y, por suerte para él, la comunidad hispana de Miami es uno de los únicos lugares de Estados Unidos donde el juego está en auge. Si el GOAT necesita un socio, no necesita buscar muy lejos, ya que el propietario del Inter Miami, David Beckham, también es conocido por ser un gran fanático de este deporte.
Los jugadores retirados se están incorporando al pádel en manadas. Incluso está tendiendo puentes entre ex rivales. El ex portero del Real Madrid Iker Casillas y el ex lateral derecho del Atlético Juanfran se enfrentaron en un torneo de pádel. En 2022, durante el Mundial, se celebró un torneo de “leyendas” en Lusail, Qatar, donde Ronaldo (R9), Kaká, Francesco Totti, Diego Forlán y Gabriel Batistuta fueron solo algunos de los exjugadores que hicieron acto de presencia.
Convertirse en entrenador o pandit solía ser el camino clásico para un futbolista retirado. Quién sabe, ¡ahora podría ser jugador de pádel a tiempo completo! Lo que es seguro es que el juego seguirá creciendo y el fútbol seguirá siendo una gran parte de él.
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