Opinión: el desafío de terminar con la Borja-dependencia
Miguel Borja fue durante buena parte del 2024 uno de los pocos argumentos que tuvo el equipo de Martín Demichelis para sostenerse en la pelea. En partidos en los que River jugaba decididamente mal, o en los que no terminaba de imponer la idea que pretendía el entrenador, tenía en los pies del Colibrí una carta de gol casi asegurada.
Los números son elocuentes: durante el primer semestre del año, Miguel Borja anotó 25 goles en 26 partidos jugados. Redondeó un promedio de gol de 0.96, es decir, casi un grito por partido. Anotó el 44,64% de los tantos que marcó River en todo esa parte de la temporada. El equipo fue definitivamente “Borja-dependiente”. Fue lindo mientras duró.
El remedio fue peor que la enfermedad. Porque como sucede con todos los goleadores, hay épocas de sequías y malas rachas, muchas veces difíciles de explicar desde la lógica. Todos en algún momento pasan por esto. Y es justamente lo que está sucediendo con Miguel Borja en este momento del 2024, en el que parece estar enemistado con el gol y bajoneado por la situación.
Los números vuelven a ser elocuentes: sobre un total de 15 partidos disputados, Miguel Borja anotó solamente 3 goles. Es decir, redondea un promedio de gol 0.20. Muy lejano del casi gol por partido que consiguió en el primer semestre del 2024. Y en el aporte global se nota todavía más esta mala racha: River lleva anotados solamente 17 goles y el aporte del Colibrí es de apenas 17.64%.
'BORJADEPENDENCIA' ⚽🔥
— 365Scores (@365ScoresApp) July 23, 2024
Miguel Borja🇨🇴 ha convertido los últimos 7 goles de River en partidos oficiales. El 'Colibrí' sigue de racha y demuestra que no puede faltar en el equipo de Demichelis.
Y en Colombia también hace ruido al recordar que Borja no fue la primera opción de… pic.twitter.com/oqie53SejZ
El desafío de terminar con la Borja-dependencia
Marcelo Gallardo es un entrenador que se caracteriza por sostener a sus futbolistas desde lo emocional, aún en los peores momentos. Así lo han reconocido la mayoría de los protagonistas que han pasado por River en su ciclo anterior. Y así sucede con Miguel Borja en estas semanas complicadas para el colombiano, en las que atravesó no solo avatares deportivos, sino también algunas situaciones extra-deportivas y familiares.
El último viernes, tras la pobre igualdad ante Defensa y Justicia, el Muñeco habló del momento de Miguel Borja y de cómo cambió su situación desde que asumió como entrenador. Hasta sonó como un tirón de orejas para el Colibrí, pero en el fondo lo que hizo fue una profunda autocrítica. Y reconoció que la Borja-dependencia no ha sido demasiado saludable para su equipo.
“Sé que tenemos que hacer goles y no estamos haciéndolos, antes de que yo llegara, Borja era el goleador del equipo y ahora no está haciendo goles. Claramente tenemos que generar otras alternativas para hacerlos, todo eso hay que resolverlo en un partido”, declaró Marcelo Gallardo en conferencia de prensa. Y no hizo otra cosa que profundizar en una de las cuestiones que tiene que resolver en el corto y mediano plazo.
En definitiva, es hora de terminar con la Borja-dependencia. Que no significa prescindir de la presencia de Miguel Borja en el equipo, sino la búsqueda de otros caminos para que River vuelva a ser un equipo letal y goleador, sin que necesite exclusivamente del colombiano, como sucedió hace poco tiempo atrás. Que los goles sean producto del andar colectivo, y no al revés. En definitiva, es la fórmula que llevó al River de Marcelo Gallardo a ser protagonista y dominador en casi todos los escenarios.